Yo soy el amor

Sábado de Pascua Marzo 22/2008

Perdonaos unos a otros

Yo he pasado por aquí;
 lleven la paz, sean la paz, sean la luz
.
Recordad, estaré siempre con vosotros.
Solo vean a mi luz, a mi vida,
¡Yo estoy con vosotros, Yo soy el Señor!
Sean luz, sean vida, no os destruyáis.
«Yo soy el que Soy»
Y estoy con vosotros,
el Dios de la vida, el Dios del amor.
Hijos, tengo dolor, pero llevad amor.
Quedaos conmigo.
¡Velad, velad, orad, orad!

la mies es mucha

Vosotros sois la mies y los obreros.
Recordad, mi Madre está también con vosotros,
y la hueste angélica.
Brillad, brillad, brillad.
Mi amor y mi paz os dejo.
«Yo soy el que fui, Yo soy el Amor, Cristo hoy, Cristo ayer, Cristo siempre».
¡Amaos!
Yo os dejo mi paz.
Perdonad, perdonad, perdonad.
Mi luz y amor os dejo.
Os Amo
“No olvidéis a mi Madre, ella os protege”.

El mensaje a la luz de la palabra

Era la noche de la Vigilia Pascual- Sábado Santo, día en que la iglesia católica celebra la Resurección de Jesucristo. Celebración por excelencia de la victoria sobre la muerte a la vida. La victoria de la Luz sobre las tinieblas,la oscuridad y el pecado.

El paso de Cristo vivo y resucitado en medio de esta comunidad.

En esta ocasión me hallaba cantando en el coro de la Iglesia, ubicado en el segundo piso, desde allí podía divisar todo lo que estaba ocurriendo.  En cuanto a la liturgía ya se habia realizado el lucernario, la liturgía de la palabra y mientras el Sacerdote y los ministros se dirigian a la fuente bautismalpara proceder con  la liturgía bautismal, cantabamos una alabazanda correspondiente al Espiritu Santo.

En el momento que el Sacerdote introduce el ciro pascual (signo de Cristo resucitado) en la fuente bautismal y ora invocando la presencia del Espíritu Santo para que descienda sobre esta agua con la que serán bautizados los catecúmenos. Empiezo a sentir una fuerza que entraba dentro de mí, algo inesplicable, que ya había experimentado anteriormente, fuerza que me hablaba y repetía estas palabra.

Yo, deje de cantar y recuerdo que comence a escribir todo lo que se medicia al corazón en el repaldo de las partituras. Podía ver los rostros de  hermanos del coro pues me miraban y no entendian lo que me estaba ocurriendo.

Quiero compartir esta reflexión, porque  el Señor me permitió vivir esa  pascua,  el paso de Jesús resucitado en esta comunidad, que como en muchas otras  vivía conflictos parroquiales, que estaban afectando a sus hermanos. Ya que el humo de sátanas ya había entrado vestido de oveja, a traer discordia, división y chismes. Pero ante  el amor, la misericordia de Cristo el Resucitado y  Luz del mundo nos deja estas palabras enseñándonos nuevamente a perdonar, a ser portadores de la paz y Luz de las naciones.

Recondándonos una vez de la protección de Nuestra Madre y Señora la Santísima Virgen María. 

Las siguientes citas biblicas nos ayudarán a reflexionar la palabra para hacerlas vida en nuestra vida.

«Dijo Dios a Moisés: “Yo soy el que soy”. Y añadió: “Así dirás a los israelitas: ´ Yo soyʼ me ha enviado a vosotros”». (Éxodo 3,14).

 «Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en la cima de un monte».(Mateo 5, 14).

Y les dijo: «La mies es mucha, y los obreros pocos. Rogad, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies»(Lucas 10. 2).

 «Y si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con él». (Romanos 6,8)